Esta kiche puede ser nuestra salvación ante una visita inesperada y nuestra solución para una cena rápida y apetitosa.

Se elabora en pocos minutos.

No contiene demasiada grasa porque no lleva nata.

La masa brisa refrigerada, (no congelada) no requiere tiempo de espera para su descongelación.

INGREDIENTES:

Una base de masa brisa refrigerada (yo he utilizado la de la marca RANA)

2 cebollas

1 calabacín

1 huevo

3 lonchas de beicon o jamón

4 lonchas de queso Gouda

Queso parmesano rallado

1 cucharada de piñones

Sal y pimienta.

ELABORACIÓN:

Se pelan y cortan las cebollas en juliana y el calabacín a dados pequeños.

Se pochan los dos ingredientes en la sartén hasta que estén blanditos.

Se bate el huevo y se mezcla con los ingredientes anteriores.

Se disponen las lonchas de queso sobre la masa y a continuación se vierte la mezcla de cebolla, calabacín y huevo.

Se distribuyen por encima el beicon o jamón cortado en tiritas y los piñones.

Se cubre todo con una buena capa de queso parmesano rallado.

Introducimos la kiche en el horno que previamente habremos calentado a 190º.

Esperamos a que la superficie adquiera un ligero tono dorado.

¡Y LISTA PARA SERVIR!

kiches